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Sí, soy negativa, cabezona, estúpida y también puede que esté loca.
Nunca me sale nada bien, y si algo que realmente merece se acerca a mí, sin quererlo, lo acabo fastidiando siempre. Es algo que tengo casi asumido ya.
Porque en la vida caes y te levantas, y así sucesivamente unas mil veces, hasta que un día te cansas y te planteas que no te merece la pena, que nada te sale bien y que no merece la pena ni intentarlo.